Ir al contenido principal

Carta que de nuevo no leerás

Hola, ¿cómo estás? Pienso en ti a diario. Juré que no te lo iba a decir pero es que no se me ocurre otra cosa. 

Cierro los ojos y ahí estás, sueño y ahí estás, veo el atardecer y recuerdo tus palabras, y ahí estás. Miro a una pareja de niños, tomados de la mano, y nos recuerdo juntos, y ahí estás. Vivo, y ahí estás. 

Eres como una dulce pesadilla, verás, te sigo amando y ya no estás. Y ya no estás desde hace tanto, y sin embargo estás.

¿Cuántos años fueron? No sé, ¡qué más da!, como si el amor se midiera en tiempos. 

Éramos unos niños, jugando a amarse, y lo hicimos mal, ¿nos amamos de verdad? ya no lo se. 
Recuerdo tu cara, tu pelo, tu voz.
Cuando te sueño estás igual, con tus ojos verdes, como mi color favorito, con tu pelo, amo que era negro, con tu piel, tu barba a medias, tus pestañas, tus piernas, tus abrazos, todo tú. Cuando te sueño sufro un poco, porque solo es eso, un sueño. 

Cuando te sueño y despierto sufro porque ya no estás. Han pasado tantos años y sin embargo no te vas.

Te escribo porque no tengo mejor manera de besarte, te pienso porque es mi forma de amarte, te recuerdo para no olvidarte, y me marcho para no matarte.

Amor, querido amor, espero que tú estés bien. Amor, no me despido, porque no pienso marcharme, simplemente ya no voy a estar.


Adiós, amor.



Entradas más populares de este blog

--malaci

Malaci  es un acrónimo, que proviene de los nombres de tres hombres que - en su tiempo - fueron importantes para mi: M auricio,  Al an y  Aci el. Ellos tres me aportaron vivencias significativas, experiencias imborrables y conocimiento irreemplazable, es por eso mismo que he decidido dedicarles mi manía de expresarme mediante palabras escritas y adopté este seudónimo, que es también un álterego. http://unabuenaputajamasseminimiza.tumblr.com

Me gustas

Me gustas tristeza, porque no me temes, porque me miras a los ojos y los vuelves de cristal.  Me gustas porque me llenas, me acompañas, llegas con recuerdos, me rompes, me desgarras, me arrullas, me invades y no te vas.  Me gustas tristeza porque eres calma, eres tormento, eres un poquito de mi, porque cuando los demás se van, tú bailas haciendo una gran fiesta.  Me gusta tu melancolía, tu dolor, tu fragilidad, tu sonrisa, tu realidad.  Me gustan tus ojos que nunca se secan, tus brillos, tu peculiar forma de hacerme sentir, que te me cueles entre las manos y escoges a los peores recuerdos como acompañantes. Me gustas tristeza porque eres fría, porque dices la verdad, por que cuando llegas me torturas con su aroma que no se de dónde lo sacas.  Me gustas tristeza, simplemente porque eres mía.