Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2015

Y si comenzamos?

Vamos a jugar, a que tú no me conoces y yo no sé quién eres. Vamos a fingir que es la primera vez que te veo, que tu mirada no significa nada para mí, y yo no significó nada para ti  Finjamos que es la primera vez que noto tu presencia hoy al borde de mi abismo, y que tú no intentas salvarme ni yo intento ayudarte.  Vamos a fingir, para poder comenzar, que tú mirada me diga si doy el paso o retrocedo.  Vamos a comenzar sin ninguna historia por qué tu pasado no me interesa y el mío no existe.  Vamos a jugar a iniciar algo más que una amistad, sin ausencias, sin voces, en un rinconcito. Vamos a jugar sin el permiso del futuro, a escondidas del presente, con el descuido del pasado.

Carta número... Otra más

Como todo lo anterior no sé cómo empezar y te juro no sabré cómo terminar, pero si sé que siento, por ejemplo, cuando me miras de esa forma tan peculiar que tienes como queriéndome sorprender me derrite, esa sonrisa de lado que pones mientras me cuentas algo con emoción, me hace soñar, y no te culpo, me la vivo soñando pensando en lo que podría ser. No estoy muy segura si te quiero en mi vida solamente como amigo, tampoco se realmente si te quiero como pareja, lo que si se, es que no sé que es lo que yo haría sin ti en mi vida.  Hoy sé por lo que nos a pasado, que si te vuelves a ir, no sé en qué parte del mundo o tal vez a la vuelta de mi casa, pero sé que te encontraré porque no eres el ser humano que está en mi vida de paso, tú llegaste, para quedarte no se como, pero lo sé. Contigo e aprendido a escuchar a la gente, y el mundo en general no puede estar equivocado al decirme «ten paciencia» o «lo que es para uno, nadie lo puede quitar» en fin igual solo pueden ser personas que no qu

Deseos simples...

A lguien que me tome la mano,  que me lleve a caminar sin un camino,  que me haga sentir segura y bonita con una mirada. Quiero seguir viviendo en cuentos  y aun creer en el amor y en sus clichés,  creer que el tiempo sana las heridas  y que los gatos tienen siete vidas. Deseo un amor genuino y desinteresado,  alguien que construya mis alas.   A las que ni el aire pueda romper,  alguien que me acompañe a volar. Busco a alguien que me levante el ego, la falda y el corazón,  que me quite los miedos y la vergüenza,  que me descubra las ganas en el color de sus mejillas  que me desnude el cuerpo, el alma y los sueños.

No he querido arrancar de mi piel

Hace tanto tiempo que no me detenía a pensar en por qué la soledad cala tanto en las tardes lluviosas y en por qué me la paso escribiendo en lugar de fumarme lo que queda de tu rastro. Le tengo miedo de muchas cosas pero más miedo tengo de golpear las paredes, tirarme al suelo y decir eso tan trillado: «No puedo vivir sin ti». He dejado de caminar acompañada sólo para no recordar tus pasos en otro ser, pero aquí sigo, sola, para que nadie los pueda borrar. No he querido arrancar de mi piel tus caricias porque suelo usarlas como mantra. Quizá no entiendas lo que te escribo y lo comprendo por que tú nunca entendiste lo que trataba de decirte y qué mal, por ti, por mí, por el cielo, por las fotografías, por todos los poemas que no te enamoraron.